En mayo pasado, el país reportó temperaturas máximas históricas y Querétaro no fue la excepción con niveles cercanos a los 40 grados centígrados. En contraparte, el verano y otoño han sido enmarcados por lluvias atípicas. Es claro, el cambio climático llegó al estado.
Ante dicho panorama, a nivel global se reporta una tendencia para impulsar medidas amigables con el medio ambiente, como las llamadas energías verdes, el desarrollo productivo sustentable, economía circular, entre otras.
En esa línea, el gobierno de Querétaro anuncio el Plan de Acción Climática para el Turismo en Querétaro, una iniciativa que busca enfrentar los retos del cambio climático y garantizar el desarrollo sostenible de esta actividad en la entidad.
Así, ante líderes del sector, la secretaria de Turismo del estado, Adriana Vega Vázquez Mellado, destacó que Querétaro es un estado privilegiado por sus riquezas naturales, históricas y culturales, características que lo convierten en uno de los destinos más competitivos y atractivos del país. Asimismo, subrayó la importancia del turismo como un motor económico que aporta alrededor del 20% del Producto Interno Bruto del estado.
“Esta importante contribución a nuestra economía conlleva una gran responsabilidad: preservar las condiciones que hacen de Querétaro un lugar tan especial y garantizar el bienestar de las personas y comunidades que dependen de esta actividad”, afirmó.
La funcionaria afirmó que con dicho plan, Querétaro se consolida como un referente en la lucha contra el cambio climático desde el turismo, comprometiéndose a promover una actividad turística responsable que contribuya al desarrollo económico sin comprometer el medio ambiente.
El Plan de Acción Climática para el Turismo es una respuesta coordinada ante los desafíos ambientales, particularmente los derivados del cambio climático. El documento, que sigue las directrices de la Declaración de Glasgow para la Acción Climática del Turismo de la Organización Mundial de Turismo, incluye acciones clave como la mitigación de emisiones de carbono, la adaptación a los fenómenos climáticos extremos, y la transición hacia el uso de energías renovables y una mayor eficiencia energética.
“Los fenómenos climáticos como las altas temperaturas y las lluvias atípicas que hemos presenciado recientemente son un recordatorio de que el cambio climático ya está afectando nuestros destinos turísticos. Ante estos riesgos, debemos actuar de manera decidida,” puntualizó.
El plan se implementará de manera gradual y medible, con la colaboración de diversos actores del sector turístico, la iniciativa privada, la academia y la sociedad civil. La funcionaría estatal hizo un llamado a todos los involucrados para unirse a este esfuerzo colectivo, asegurando que la colaboración será clave para lograr una transición hacia un turismo responsable y sostenible.
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